El CT BETA presenta los resultados de 18 años de seguimiento de un ensayo de fertilización con purín en Osona

El estudio se centra en evaluar los efectos que tiene la fertilización nitrogenada con purín de cerdo en la producción y la calidad forrajera de los cultivos, en la dinámica de los nitratos en el suelo y en la calidad del suelo (física, química y biológica). Es un proyecto que busca capitalizar los datos recogidos durante estos años para profundizar en la evolución de distintos parámetros edáficos y demostrar el impacto de la fertilización con purines de cerdo en la calidad de los suelos.

Osona, una comarca conocida por su elevada actividad ganadera, ha encontrado en su aplicación agrícola el destino más económico y natural para las deyecciones generadas. Esta práctica es clave para el mantenimiento de la producción agraria, puesto que permite optimizar el uso de los fertilizantes orgánicos como abono para los cultivos. En diversas explotaciones de Osona, es habitual la práctica del doble cultivo anual, combinando un cereal de invierno y un cereal de verano, con destino forraje. Debido a la singularidad de estas explotaciones, es esencial llevar a cabo una correcta fertilización, especialmente en lo que se refiere al nitrógeno.

Algunas observaciones relevantes

En el ensayo coordinado por la investigadora Carme Casas del CT BETA, se pone de manifiesto que, en los sistemas de doble cultivo anual en la Plana de Vic, el rendimiento del cultivo de verano depende totalmente de las precipitaciones del período de junio a septiembre. En el contexto de cambio climático actual, donde se ha acentuado el período de sequía del verano, se evidencia que el cultivo de verano no sería viable si sigue la tendencia actual.

Los resultados muestran que, en el cultivo de invierno, aumentar el uso de fertilizantes con purín de cerdo aumenta significativamente su producción. Por otra parte, no se observan cambios significativos en la producción del cultivo de verano en estos sistemas de doble cultivo. En condiciones de poca pluviometría, los cultivos de secano utilizan de forma menos eficiente el nitrógeno que tienen disponible en el suelo, lo que supone que con un exceso de fertilización el contenido de nitratos pueda aumentar de forma notable. Por tanto, no se recomienda superar límite de 170 kg N/ha en la fertilización en sistemas de doble cultivo como el analizado, el límite actual de aplicación según la normativa.

También se han detectado importantes cambios en la materia orgánica estable del suelo, con una disminución significativa de los ácidos húmicos y fúlvicos, proporcional a la dosis de nitrógeno aplicada, factores que tienen una incidencia directa en su fertilidad.

En los últimos años, este proyecto se ha financiado a través de la Operación 01.02.01 de Transferencia Tecnológica del Programa de Desarrollo Rural de Cataluña 2014-2020. A partir de los resultados obtenidos en el ensayo se elaborará un documento sobre la estrategia de fertilización en los sistemas de doble cultivo en condiciones de secano en clima submediterráneo.