El proyecto NUTRI-KNOW potenciará la innovación en el sector agroalimentario
El proyecto trabajará con el objetivo de amplificar el impacto de los resultados obtenidos previamente en Grupos Operativos de toda Europa
En los últimos años la UE ha financiado una gran cantidad de Programas de Desarrollo Rural, que han sido una ayuda fundamental para promover que muchas empresas del sector primario y centros de investigación de todo el continente desarrollen procesos innovadores en muchos ámbitos, como el de la gestión de deyecciones ganaderas y de los nutrientes que contienen. Sin embargo, también se ha constatado que este tipo de proyectos no han tenido el grado de impacto que se esperaba y que hay mucho conocimiento de que se mantiene poco explotado. Por este motivo, el proyecto europeo NUTRI-KNOW, coordinado por el Centro Tecnológico BETA de la Universidad de Vic – Universidad Central de Cataluña (UVic-UCC), trabajará para cambiar la dinámica actual que se sigue para recoger y compartir este conocimiento, y también para hacerlo más accesible y orientado a la práctica.
El proyecto NUTRI-KNOW, con un presupuesto de 2 millones de euros y financiado por el programa Horizon Europe, se llevará a cabo mediante un consorcio formado por 11 socios provenientes de España, Bélgica, Irlanda, Dinamarca, Italia y Alemania. En Cataluña contará también con la participación del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural (DACC) de la Generalitat de Cataluña. En la reunión de lanzamiento del proyecto, que se celebró este martes en la UVic-UCC, participó Elisenda Guillaumes, directora general de Agricultura; Eva Espasa, vicerrectora de Investigación y Transferencia de Conocimiento de la UVic-UCC; y Sergio Ponsá, director del CT BETA, entre otros.
Sergio Ponsá comentó que «proyectos como éste, que trabajan para incrementar el impacto de la innovación, son el mejor ejemplo de la apuesta que el BETA ha hecho desde el primer día». Según el director del CT BETA, «tenemos que empezar a hablar también de conocimiento circular, y de la necesidad de dar valor al trabajo que se ha hecho».
Desde el punto de vista académico, Eva Espasa explicó que “el CT BETA por sí mismo, y los proyectos que coordina o en los que participa, ejemplifican muy bien cómo es y cómo queremos que sea el modelo de investigación de nuestra Universidad”. En este sentido detalló que debe ser una investigación “con visión y vocación internacional, innovadora, aplicada y consciente, que aporta soluciones a problemas reales y que, además, aterriza en cuestiones y temáticas que tienen un interés real para nuestro territorio y las personas que habitan”.
Por su parte, Elisenda Guillaumes, hizo un repaso de todos los proyectos de los que el DAAC es socio. Según ella, el Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural “espera que proyectos como éste ayuden a convertir los problemas en oportunidades, y por tanto, es el momento de compartir el conocimiento para aprovechar los logros y los avances que han tenido los otros países que participan en este proyecto y hacerlos realidad”.
La realidad actual
En Cataluña, hasta ahora el sector agroalimentario ha contado con herramientas para financiar cientos de Grupos Operativos y Proyectos Demostrativos, gracias al Plan de Desarrollo Rural 2014-2020 de la Generalitat. Los Grupos Operativos son proyectos de dos años muy aplicados a un reto concreto, que facilitan que las empresas tengan acceso a trabajar con desarrolladores tecnológicos, mientras que los Proyectos Demostrativos han dado a los centros tecnológicos catalanes la oportunidad de disponer de recursos para difundir los sus propios resultados.
Esquemas como éste, con pequeñas diferencias, se han replicado en la mayoría de países y regiones de la Unión Europea. Sin embargo, por un lado, se ha constatado que este tipo de proyectos no han tenido el grado de impacto que se esperaba, sobre todo entre las propias empresas del sector. Por otra parte, se ha puesto de manifiesto la gran cantidad de conocimiento sobre tecnologías, productos, herramientas y recomendaciones innovadoras de gestión para el sector agroalimentario que se han podido desarrollar, pero que son poco explotadas.
Ante esta realidad, el consorcio del proyecto NUTRI-KNOW trabajará con el objetivo de amplificar el impacto de los resultados obtenidos previamente en Grupos Operativos de toda Europa, poniendo énfasis en la temática de la gestión de los nutrientes. NUTRI-KNOW pondrá el foco en este campo, pero se espera que las metodologías que se desplieguen puedan ser aplicables más adelante en cualquier temática de interés y para cualquier país o administración pública encargada de gestionar convocatorias de financiación para la innovación en el sector agroalimentario.
Para conseguirlo, será necesario cambiar la dinámica actual que se sigue para recoger y compartir este conocimiento, para hacerlo más accesible y más orientado a la práctica. En este sentido, precisamente, una de las principales aportaciones del proyecto NUTRI-KNOW será la definición de nuevos materiales y metodologías que aceleren la difusión y replicación de los resultados conseguidos en grupos operativos.
A la larga, experiencias como la del NUTRI-KNOW deben ayudar a crear nuevos modelos de gobernanza de la I+D+i, integrando mejor los nuevos proyectos de innovación y las necesidades, los retos y las oportunidades más urgentes del sector agroalimentario, para generar confianza y establecer conexiones efectivas que aumenten su impacto. Además, también permitirá evitar duplicidades con proyectos en curso o acabados, ayudándoles a distribuir mejor los recursos de financiación.